La dinámica dimensional de
Francisca Blázquez se estructura en base a una
obra claramente cósmica, galáctica y sideral, que empieza y acaba en el
universo, en el conjunto de energías que interactúan mutuamente, desde el
principio hasta el fin.
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Francisca Blázquez. Obra 2009 |
Muestra una dinámica de intercambio energético, una evidencia de lo sublime
en lo progresivo sutil.
Sus formas son complejas, claramente basadas en alusiones a una realidad
que no es directamente constatable o bien están fundadas en una
ambivalencia doblemente interesante porque se concentran en la propia
dinamicidad de lo galáctico y su sucesión de hechos y de innumerables
causas y efectos que son las que dan sentido definitivo a la propia
vinculación con la voluntad superior.
Exhibe los principios de las leyes herméticas, las consideraciones sutiles
de quienes viajan a través de los entresijos que se fundamentan en el
conocimiento íntimo de la conjunción de globos y esferas en un espacio
ingrávido que es como el subconsciente imaginario de uno mismo.
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Francisca Blázquez. Obra 2009 |
De repente sus cosmos, esferas, globos terráqueos, formas alambicadas y
complejas, alusiones a la ciudad del agua, a la Venecia inmortal, a la
cristalografía del agua, a la luz del espíritu, a la luz física que se
mueve y reconvierte todo lo que ilumina se transforma con la serenidad de
quien se sabe poseedor de la fórmula mágica que concentra los puntos de
definición que tejen y destejen una sinfonía mundial en lo universal, para
ser conscientes de que todo lo que hay fuera equivale a todo el mundo
interior de uno mismo.